- Busca una Mujer · 1988
- Soy Como Quiero Ser · 1987
- Aries · 1993
- Soy Como Quiero Ser · 1987
- Romance · 1991
- 20 Años · 1990
- Busca una Mujer · 1988
- 20 Años · 1990
- Romances · 1997
- Romances · 1997
- México en la Piel (Edición Diamante) · 2004
- Busca una Mujer · 1988
- Romance · 1991
Álbumes imprescindibles
- El concepto de una estrella polifacética que puede alternar con facilidad entre baladas pop y un repertorio de rancheras con acompañamiento de mariachi es parte del ADN de la música mexicana, un arte cultivado por intérpretes tan dispares como Alejandro Fernández, Pepe Aguilar y Rocío Dúrcal. En noviembre de 2004, Luis Miguel dejó de lado las baladas y boleros que cimentaron su fama y editó su primer álbum de música para mariachi. Todas las decisiones artísticas asociadas con este proyecto fueron irreprochables: desde actuar como productor hasta colaborar con Armando Manzanero como director musical, y elegir al mariachi más prestigioso de la historia para acompañarlo: Mariachi Vargas de Tecalitlán. Mientras que los álbumes con los que LuisMi resucitó al bolero se basaron en una absoluta reinvención sónica del género original, su incursión en la música de mariachi se basa en una reverencia absoluta a sus raíces. Las canciones de México en la Piel parecen flotar sobre una suntuosa nube de cuerdas, voces y trompetas, todo calibrado con envidiable delicadeza. La voz de LuisMi, que siempre proyectó anhelo y pasión cuando la circunstancia lo requiere, ocupa por momentos un papel protagónico, pero también sabe compartir el escenario con este acompañamiento de lujo. Por momentos, el álbum se mantiene fiel a los climas recios de la ranchera tradicional, como el espíritu sombrío que define la versión de “Un Mundo Raro” de José Alfredo Jiménez. “Paloma Querida”, también de José Alfredo, y “Échame a Mí la Culpa” exprimen sus emociones a flor de piel. Pero en “México en la Piel”, un tema original de 1990, y “Sabes Una Cosa” (una de las más pegajosas del disco) el coro de voces sedosas hace que el arreglo se nutra de una sensibilidad más cercana al pop. Las incursiones de Luis Miguel en el bolero habían demostrado la seriedad con la que el cantante encaró un género musical que inicialmente le era estilísticamente ajeno. México en la Piel fue un éxito de ventas, acompañado por una gira de dos años. Su triunfo no fue sólo comercial, sino también artístico. Una producción de conmovedora sutileza, es uno de los discos de mariachi más logrados de las últimas décadas.
- En 1934, el argentino Carlos Gardel lanzó “El Día Que Me Quieras”, un sentido tango escrito por Alfredo Le Pera, que a su vez se inspiró en el poema homónimo de 1919 del mexicano Amado Nervo, en el que el amor cura las heridas, viste a las rosas de colores intensos y deja celosas a las estrellas. Sesenta años después, en 1994, el mexicano Luis Miguel presentó su versión de “El Día Que Me Quieras” como el primer sencillo de su décimo álbum de estudio, Segundo Romance. Tenía 24 años y ya estaba entre los cantantes más importantes de América Latina, región que abarcó con este disco en el que once clásicos, principalmente boleros, cobraron nueva vida en su voz. La incursión de Luis Miguel en los boleros, un género del que disfrutaba a profundidad aunque no lo exhibiera en su discografía, empezó con Romance, de 1991. Y luego de Aries (1993), de baladas y pop, volvió a la carga con Segundo Romance, producido por Juan Carlos Calderón, Kiko Cibrián y Armando Manzanero, con quien creó la primera entrega. Luis Miguel recorrió seis décadas para recrear temas como “La Media Vuelta” de José Alfredo Jiménez, “Delirio” del cubano César Portillo de la Luz e “Historia de un Amor” del panameño Carlos Eleta. Hábiles arreglos de cuerdas y vientos, junto con la marca de la voz del Sol de México, impulsan Segundo Romance, que dialoga a través del tiempo con estándares latinos para demostrar su fuerza desde un ángulo contemporáneo, con el amor como columna temática y fuerza creadora, una marca de identidad regional. Planeado en la Villa Mykonos de Acapulco, mientras Luis Miguel estaba de luto por la muerte de su manager Hugo López, quien lo impulsó a sumergirse en esta aventura, y grabado en los estudios Record Plant de Los Ángeles, Segundo Romance ganó el GRAMMY a mejor álbum de pop latino y fue Disco de Platino alrededor del mundo. Este nuevo nivel de reconocimiento internacional para el cantante llegó justamente con música local, con la tradición cuya vigencia no depende de modas. Es un disco que abarca a toda América Latina y sus canciones románticas, que las abre a nuevos públicos o se las recuerda a quienes crecieron con ellas. Así, Segundo Romance también es un homenaje a esos grandes exponentes del bolero de quienes Luis Miguel recibió la estafeta para llegar hasta donde había llegado a finales del siglo XX.
- Cuando Luis Miguel entró a los estudios de WEA Latina para grabar su noveno disco en 1993, lo hizo pensando en una sola cosa: hacer un álbum distinto, con temas que muevan masas. Un par de años antes había firmado uno de sus capítulos más celebrados, el primer episodio de su exitosa saga de boleros, Romance (1991), que podía convertirse en una zona de confort al crear un disco concepto cuyas posibilidades de explotación en el corto plazo eran evidentes. No obstante, su ambición lo llevaba a un proyecto que fuera más allá y que, por primera vez, explorara sus verdaderos gustos sin ningún tipo de limitación. O, en otros términos, que por fin le resultara divertido. Nacido en abril de 1970, Luis Miguel es, bajo el zodiaco occidental, un aries. Escudriñando entre las canciones que podrían titular su nuevo álbum, recordó que este disco, el primero producido por él, sería bajo sus propios términos: enteramente suyo. Así, Aries se convirtió en su proyecto más ambicioso, tardando casi un año en completar su grabación y gastando más de millón y medio de dólares en el mismo. La mente maestra encargada de materializar las ideas del Sol fue Kiko Cibrián, contratado tras un fallido intento por coincidir con la visión que Bruce Swedien, conocido por su trabajo con Quincy Jones especialmente en Thriller (1982), tenía para el LP. Así de “poca” era la exigencia. Y bueno, contar que Aries se hizo en los términos que Luis Miguel propuso no es sólo un decir. Francisco Céspedes y Juan Luis Guerra le escribieron temas bajo su deseo específico, con las baladas “Pensar en Ti” y “Hasta Que Me Olvides”, respectivamente. Otro ejemplo: para “Qué Nivel de Mujer”, una reinterpretación en español de “Attitude Dance” de Tower of Power, el Sol buscó personalmente al grupo californiano para pedirle la canción e incluso grabar la sección de vientos de su versión. El R&B, soul y funk pasan lista en la placa también por afán personal de Luis Miguel, quien citaba dichos géneros como influencia y con los cuales buscaba generar una atmósfera dance más ad hoc a la década, misma que mostró desde el track inaugural “Suave”. Sin embargo, su escape no fue total y decidió incluir baladas más seguras, que aparecen mezcladas junto a las melodías más arriesgadas de Aries. De esta forma, hablamos de un disco que lo llevó a la cima y lo emancipó, pero que lo mantuvo en un limbo constante: aventurándose y tomando las riendas de su propio destino, a la vez que temeroso a exponerse y mostrarse íntimo. Al final, ¿qué no es esa la complejidad de un aries? La del humano que pasea en un convertible por Acapulco, para convertirse en ermitaño solitario al llegar a su propia mansión.
- Editado en noviembre de 1991, Romance no sólo marcó un cambio existencialista en la carrera de Luis Miguel, sino que también abrió horizontes nuevos para la música latinoamericana en general. Bajo la valiosa dirección artística del maestro Armando Manzanero, LuisMi dejó atrás su imagen de ídolo juvenil y descubrió una identidad nueva como intérprete maduro y sensible de boleros clásicos. Curiosamente, la idea inicial era realizar un álbum con composiciones originales del español Juan Carlos Calderón, fiel colaborador del cantante. Pero cuando ese proyecto se retrasó indefinidamente, LuisMi encontró refugio en uno de los géneros primordiales del universo emocional latinoamericano. Y lo hizo asesorado por uno de sus cultores más sofisticados. En ese momento, el bolero era considerado un género opaco y avejentado. Pero la producción de Manzanero (junto a Luis Miguel) y los aterciopelados arreglos orquestales del argentino Bebu Silvetti renovaron la presentación del repertorio con un tinte cálido y cosmopolita que se benefició de la tecnología emergente de los años 90. Viéndolo desde la perspectiva del presente, el bolero era un formato idóneo para la voz de LuisMi, su mística elegante y caballerosa. Gran parte del éxito de Romance se basa en la astuta selección de sus doce canciones, desde el “Inolvidable” que Tito Rodríguez convertiría en himno de desamor y congoja en la década del 60, hasta “Contigo en la Distancia”, joya inmaculada del cancionero cubano, obra del genial César Portillo de la Luz. En el mundo estético de Romance, las texturas tropicales del bolero afrocaribeño conviven con la ternura de tríos legendarios (Los Panchos, Los Tres Ases) y las composiciones de autoras mexicanas como María Grever (una versión fantástica de “Cuando Vuelva a Tu Lado”, con dejos de funk en el bajo y la percusión). El álbum fue grabado en los estudios Ocean Way de Los Ángeles y, como consecuencia, se vio beneficiado por la presencia de grandes músicos de la escena californiana especializados en la salsa y el Latin jazz: el conguero Luis Conte (que en su momento salió de gira con Madonna), el saxofonista colombiano Justo Almario y el trompetista Ramón Flores, entre otros. Es por eso que en Romance cada solo instrumental cuenta; es un disco detallista y enamorado de la belleza formal de sus estructuras. Además de vender millones de copias, Romance generó tres álbumes adicionales, dio nueva vida al bolero y confirmó a LuisMi como uno de los artistas fundamentales de su generación.
- En el año en que cumplió 18 y alcanzó la mayoría de edad, Luis Miguel presentó Busca una Mujer, su sexto álbum de estudio. Este es, pues, un proyecto bisagra en la discografía del mexicano, la transición entre la adolescencia y la adultez de un artista que desde muy joven había sido figura pública. Con todos los focos sobre él, en este disco dejó atrás el pelo largo que lo había caracterizado en su primera etapa (pensemos en el video de “Ahora Te Puedes Marchar”, de su proyecto anterior) para adoptar un aspecto más maduro, con el pelo más corto. Este rito de paso simbólico quedó escenificado al inicio del icónico video de “La Incondicional”, uno de los grandes éxitos de este álbum y de toda su carrera, que dominó los televisores latinos durante ese año y los que vinieron. En 1988, cuando fue publicado Busca una Mujer, el pop en español era un territorio diverso, atravesado por los sintetizadores y las baterías que definieron la década, el rock que se extendía desde Argentina hasta España, y las baladas. Junto con Juan Carlos Calderón, el productor español que dirigió este disco así como Soy Como Quiero Ser, Luis Miguel navegó el panorama con destreza mientras definía sus intenciones musicales luego de los cortes más joviales con los que empezó en su debut de 1982. Grabado en Ibiza, Busca una Mujer es una ventana a este proceso creativo en toda su diversidad: tenemos el yacht rock de la canción que le da el título al disco, la fuerza sentimental de “Fría Como el Viento” y la energía contundente de “Separados” como posibles caminos y como colores en su amplia paleta. Hoy sabemos que en los 90 Luis Miguel se inclinaría por la balada romántica y el bolero, pero la belleza de Busca una Mujer está en su horizonte abierto y todas las posibilidades que ofrecían la época y su propia carrera. Es fascinante poder mirar por esta ventana y no sólo verlo responder a estas preguntas, sino que las respuestas sean canciones que marcaron su época. Finalmente, como queda plasmado en “Por Favor, Señora” y “Soy un Perdedor”, Luis Miguel presenta esa virtud que, además de la belleza de su voz o su arrolladora presencia escénica, estuvo ahí desde temprano para elevar su estrella: fundir la vulnerabilidad, la travesura, la queja y la añoranza del amor, equilibrar eso que todos sentimos y reflejárnoslo de vuelta cuando acudimos a su música.
- 2010
- 2008
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- 2007
- 2007
Playlists
- Escucha como nunca antes esa voz que enamora, ahora con más temas en audio espacial.
- El carisma y la sensualidad del cantante en formato audiovisual.
- Estos son los temas que el Sol de México interpreta en su gira.
- Baladas, éxitos pop, boleros y más para dedicar con la romántica voz del Sol de México.
- El Sol de México brilla en todo su esplendor sobre el escenario.
Álbumes en vivo
Recopilaciones
Acerca de Luis Miguel
Aunque sus primeros éxitos surgieron como estrella del pop juvenil a mediados de los 80, Luis Miguel (Puerto Rico, 1970) se ganó el sobrenombre de El Sol de México con baladas que conectaban directamente con la gran tradición mexicana de sus predecesores. Luego de unos años de fama televisiva como talento musical precoz, los éxitos del nuevo fenómeno adolescente alternaron entre el pop bailable de “Ahora Te Puedes Marchar” y un romanticismo juvenil que evocaba a José José y otros ídolos del pasado en “La Incondicional”. Estas canciones definieron una personalidad artística tan seductora como enigmática. En 1991, Romance revolucionó su carrera con una colección de boleros clásicos que convirtió a Luis Miguel en estrella internacional mientras afirmaba sus raíces latinoamericanas. Una figura permanente en las listas de Latinoamérica y Estados Unidos, su voz poderosa pero íntima al mismo tiempo revitalizó el cancionero de José Alfredo Jiménez, Juan Gabriel y otras leyendas de la canción mexicana en un segundo volumen de boleros, además de grabar colecciones apasionantes como México en la Piel (2005) y el emocionante homenaje a sus raíces de ¡MÉXICO Por Siempre! (2017). Cuatro décadas después de su debut, la figura de Luis Miguel sigue generando una fascinación que pareciera ser inmune al paso del tiempo.
- DE
- San Juan, Puerto Rico, United States
- FECHA DE NACIMIENTO
- 19 de abril de 1970
- GÉNERO
- Pop en español