Desde sus colaboraciones con pioneros de la música antigua como Gustav Leonhardt y los hermanos Kuijken en los años 60, René Jacobs (Gante, 1946) se ha dedicado sin descanso a explorar la música de los siglos XVII, XVIII y comienzos del XIX por los caminos más insólitos. Su vibrante voz de contratenor le llevó a contribuir a álbumes de referencia de piezas hasta entonces desconocidas de Frescobaldi, Cesti, Henri Dumont y otros maestros barrocos. En 1977, formó Concerto Vocale, una formación dedicada a la interpretación histórica de la música barroca, con la que cantó y dirigió reveladoras grabaciones para Harmonia Mundi France. Sus heterodoxas lecturas combinan uuna meticulosa escucha de las fuentes con el arrojo de abandonar las convenciones interpretativas modernas. Jacobs ha contribuido decisivamente a llevar las orquestas de instrumentos de época a los grandes teatros de la ópera, con apariciones habituales en el Théâtre de la Monnaie de Bruselas, la Staatsoper berlinesa y el Theatre an der Wien de Viena, además de ejercer de director artístico del Festival de Música Antigua de Innsbruck entre 1997 y 2009. Las bodas de Fígaro, Così fan tutte y Don Giovanni son solo algunas de las grabaciones más memorables de una discografía que comprende más de 250 álbumes. Más allá de la ópera, sus reveladoras versiones de la Missa Solemnis de Beethoven y la Pasión según San Juan de Bach iluminan nuevos ángulos de obras maestras que creíamos inmutables.