Tras la combinación de psicodelia y funk de sus trabajos anteriores, Can se aventura con géneros diferentes en su quinto álbum. Con “Moonshake” como su única canción pop, los demás temas de Future Days se adentran por el camino, entonces desconocido, de la electrónica y la música ambiental. Este fue el último álbum con el vocalista Damo Suzuki, siendo el primer experimento con el ambient de la banda, el cual determinaría el estilo de sus siguientes álbumes.