En paralelo a su propia trayectoria como solista, Michel Berger le dio la misma importancia o incluso más a su prolífica faceta de compositor, productor y director artístico. Bajo ella se puso al servicio de íconos del pop francés como Johnny Hallyday, Françoise Hardy, Véronique Sanson o la que fuera su musa y pareja sentimental, France Gall.