Aunque será siempre recordada como una de las bandas de las que surgió Guns N’ Roses (Axl Rose fue uno de sus cantantes y Rob Gardner su primer baterista), L.A. Guns son mucho más que una nota a pie de página en la escena de Los Ángeles en los 80. Su debut homónimo de 1988 destila el espíritu de la época, con el regreso al rock como celebración de la vida en el filo y los excesos, en canciones de impacto inmediato que conectan con el glamour de The Rolling Stones y New York Dolls. Con el tiempo, la agrupación adquirió una mayor sofisticación musical sin abandonar el culto al riff, y sus discos han seguido orgullosamente fieles a un sonido y una época.