Hay artistas que pasan años buscando un alias para personificar su papel dentro de la escena del hip-hop y otros que simplemente lo reciben por razones evidentes. Al ver una foto de Kid Ink no queda duda sobre por qué le dicen así: su cuerpo está cubierto de tatuajes. Sin embargo, Ink es más que un tipo con apariencia ruda: es un joven que creció admirando el trabajo de producción de otros músicos y que logró crear un estilo propio dentro del cometido segmento independiente del hip-hop. Como dice su propia canción, Ink es de esos que lo "mantienen real".