En los últimos años, el pop panyabí ha vivido una evolución que apenas encuentra equivalentes en la escena global. El cantante, compositor y actor Jass Manak es uno de los exponentes más claros de cómo las melodías de inspiración tradicional han encontrado nueva vida entre beats electrónicos, estribillos que reflejan la influencia de las listas occidentales y versos rapeados que dan sabor callejero al glamour cinematográfico que aún está en el centro del género. Desde el éxito viral de la irresistible “Prada” en 2018, cuando aún era un adolescente, Manak parece haber entrado en una época muy productiva, con dos álbumes y una veintena de sencillos que suenan innovadores y extrañamente familiares al mismo tiempo.