Antes de debutar con el EP Monstre d'amour en 2017, la marsellesa Clara Luciani ya había pasado por el colectivo psicodélico La Femme y el dúo Hologram. Un año después, su aclamado primer álbum Sainte-Victoire llevó su voz grave y profunda a lo alto de las listas francesas gracias a “La grenade”, “La baie” y otros himnos de pop efervescente, brillo electro y actitud rockera. Entre el hechizo maldito de Nico y las luces de la pista de baile, sus canciones conectan con la tradición de la vanguardia experimental sin alejarse demasiado de los sonidos que definen el mainstream contemporáneo.