Carlo Gesualdo

La fama obtenida por Carlo Gesualdo, aún durante su vida, se debía más a cuestiones de su vida privada que a su música. En 1590 asesinó a su primera esposa y al amante, y poco a poco se fue aislando de la sociedad, alimentando su creciente melancolía. Nacido en 1566, en una época en que la nobleza rara vez se dedicaba a la música, Gesualdo fue un personaje insólito: príncipe de Venosa y a la vez un compositor serio. Escribió casi exclusivamente para voces, publicando seis volúmenes de madrigales entre 1594 y 1611, y tres volúmenes de obras sacras entre 1603 y 1611. Lo impulsaba el deseo de ilustrar en exceso cada palabra, imagen y sentimiento de los textos que daba a conocer. En sus últimas obras, los resultados pueden ser extremos: Mercè grido piangendo está llena de bruscas sacudidas armónicas, disonancias y excentricidades melódicas (cromatismo). Su intensa Responsoria 1611 exhibe tendencias similares. La obra de Gesualdo fue siempre armónicamente audaz, pero no por ello dejaba de tener una perspectiva conservadora. Aunque murió en 1613, mostró poco interés por el barroco emergente. Stravinsky fue el primero de muchos compositores modernos en interesarse por su música.