De nuevo en colaboración con el director Barbet Schroeder, Pink Floyd creó esta banda sonora para la película La Vallée en apenas dos semanas a principios de 1972. Fue una sesión relativamente rápida para el grupo, que también estaba grabando por aquel entonces The Dark Side of the Moon en Londres. Es destacable la comparación con la banda sonora que habían grabado sólo tres años antes (More). Basta con escuchar la maravillosa y bucólica “Wot’s... Uh the Deal”, con unos arreglos sin fisuras, o el folk pegadizo, casi glam, de “Free Four”. En la oscura “Childhood’s End”, teñida de paranoia y de sintetizadores, puede entreverse la semilla que maduraría poco después en The Dark Side... . En este punto de su carrera, Pink Floyd ya era un grupo importante y reconocido, capaz de virar ágilmente entre el rock majestuoso y otras propuestas musicales innovadoras y asombrosas. Todas las piezas de la banda encajan en su sitio con este álbum: la introspección lírica, la inconfundible guitarra de Gilmour y el galopar característico de la sección de ritmo.