El pianista Matan Porat nos invita a un viaje musical de la mañana a la noche. Su programa, variado pero en el que las piezas pasan de una a otra con suaves transiciones tonales, es una obra de arte en sí misma. El canto gregoriano abre y cierra el día, mientras que Schumann nos lleva suavemente a la luz con su introspectivo pero radiante “Gesänge der Frühe”. La música de Beethoven, Debussy, Scriabin, Liszt, Thomas Adès, además del inquietante retrato de la noche de Bartók y un emocionante estreno mundial de “Whirling tissue of light” de Matthias Pintscher, son fascinantes interpretaciones individuales de diferentes momentos del día. Todo suena con claridad, sensibilidad y un infalible sentido narrativo.