Esta banda fue fundada por el saxofonista Sam Hillmer, quien junto con algunos de sus compañeros de la Manhattan School of Music creó un sonido que ha sido clasificado como no-wave, brutal-prog y post-minimalista. Sus primeros discos, una serie de 5 EPs, fueron hechos de manera individual por cada uno de los miembros de la banda para posteriormente dar paso a trabajos colaborativos que fueron dando forma al sonido que hoy los caracteriza como banda: una mezcla en la que el jazz, la música electrónica y el ruido pueden convivir de manera armónica.