Los cantantes y guitarristas Roberto Amor y David Merino empezaron a tocar juntos a finales de los 90, cuando aún estudiaban en un instituto de la ciudad madrileña de Parla. Inspirados por las melodías minimalistas de los Ramones y el crujido eléctrico de Pixies, de quienes terminaron tomando prestado el nombre de la banda, mantuvieron una actividad intermitente junto a la bajista Celia Becks y una sucesión de baterías y teclistas hasta que Umm... que Rico!, su debut de 2008, los consagró como herederos de Los Nikis y otras leyendas del punk pop más ácido y costumbrista. El éxito de “Palomitas para Dos” y “Miriam Díaz Aroca” (cuyo vídeo contó con la colaboración del icono de los 90) los situó en la primera línea de la segunda oleada indie. Cuatro años después grabaron un álbum homónimo repleto otra vez de viñetas cotidianas, referencias a la cultura pop de su infancia y confusos romances de fin de semana. Durante la década siguiente, apenas un par de conciertos al año recordaban a sus fans que la banda seguía existiendo. Con Lydia Carré ocupando el lugar que había dejado vacante Becks, regresaron en 2023 por todo lo alto con “El Principio de algo”, una colaboración con Samuräi, y Blockbuster, cuyas canciones conectan con el espíritu gamberro de sus comienzos y revelan al mismo tiempo una profundidad emocional que antes solo podía intuirse.