Josquin Des Prez

Aunque los trabajos de investigación han reducido en gran medida el número de obras atribuidas a Josquin des Prés, las que han pasado la prueba de autenticidad confirman su condición como un gran compositor de principios del siglo XVI. Nacido en el norte de Francia alrededor de 1450-1455, poco se sabe de su vida temprana. En 1477, su nombre aparece entre los cantantes contratados por el duque de Anjou y poco después vuelve a figurar como empleado de la familia Sforza, gobernante de Milán, y como cantante en la capilla papal de Roma. Después de otros trabajos de alto nivel en Francia e Italia, fue nombrado director de la colegiata de Notre Dame en Condé-sur-l'Escaut en 1504 y permaneció ahí hasta su muerte en 1521. Varias de sus mejores obras, como la chanson “Mille regretz” y dos ajustes del salmo De profundis, datan casi con seguridad de los años de Condé del compositor. Josquin dejó de lado la moda tardomedieval de las líneas contrapuntísticas aparentemente interminables en favor de piezas polifónicas, construidas a partir de breves hilos de melodía sujetos a la repetición o “imitación” en diferentes partes vocales. Por ejemplo, se pueden mencionar sus motetes marianos Ave Maria, Virgo Serena y Alma Redemptoris mater - Ave Regina caelorum. El refinado contrapunto de Josquin y el uso de la inflexión melódica para proyectar las emociones de una palabra o idea particular, aunque no sin precedentes, fueron innovadores en su calidad y consistencia de invención. Sus composiciones, principalmente sacras pero con notables incursiones en el campo de la chanson francesa secular y la canción italiana, sirvieron como modelos durante más de 50 años después de su muerte.