Buena parte de la fama y popularidad de Madonna se debe a su discografía divertida, variada y adictiva, que va desde el pop más puro hasta el dance, electrónica y rock. Muchas de sus canciones se han convertido en himnos absolutos, y otras tantas pasaron por debajo del radar, pero siempre reflejando el talento, la sinceridad y la rebeldía con los que conquistó al mundo.