MICRODOSIS

Hacía tiempo que esperábamos noticias de Mora. Aunque luego de la inusual calma que siguió a éxitos como “512”, nada podía prepararnos para el aterrizaje de algo tan grande como Microdosis. En un momento de la escena urbana en el que es poco común que un álbum presente más de media docena de canciones nuevas, Mora estrena 15 temas que recorren una variedad de estilos suficiente para alimentar toda una carrera. “Como fan, yo quiero escuchar un disco, no siete canciones que ya han salido hace un año”, comenta el puertorriqueño a Apple Music. “El concepto es como si estuviera repartiendo pastillas, pero de música”.

Desde el arranque de la demoledora “bad trip :(”, queda claro que no estamos frente a un simple disco de reggaetón. Los ritmos house y los sintetizadores que evocan antros al amanecer tienen tanta importancia como el flow caribeño. Incluso “MEMORIAS”, una explosiva colaboración con Jhay Cortez, se aleja de lo previsible para adentrarse en territorio dance. “No quería hacer lo que la gente esperaba”, explica Mora. “A mí me gusta experimentar con ritmos nuevos”. Eso no significa que haya abandonado sus raíces. Además de una inolvidable colaboración con Zion, Mora lanza invitaciones al perreo tan irresistibles como “2010”. Por otro lado, “ROBERT DE NIRO” y la experimental “OJOS COLORAU” son ajustes de cuentas líricos construidos alrededor de barras duras y beats implacables. “Yo no saco mucho el lado del fronteo, pero es de las cosas que más disfruto escribiendo”, confiesa.

En Microdosis, Mora muestra también una confianza incontenible en sus posibilidades. Quizás los conciertos como invitado de Bad Bunny tengan algo que ver (“compartir tantas veces tarima con Benito me ha enseñado mucho de la vida y del día a día”, nos cuenta), pero sobre todo es algo que nace de su visión musical. “Empecé siendo productor y estoy encima de todos los ritmos”, recuerda. “Si no los empiezo yo, termino haciendo las baterías y se las doy a alguien para que las mezcle. Tengo mi círculo, tres o cuatro personas que siempre están conmigo, pero me gusta tener el control”.

Estas 15 canciones están entre las más personales de su autor, pero dejan también espacio a colaboraciones que no siempre aparecen en los créditos. Los oídos más atentos descubrirán las voces de Kendo Kaponi o KAROL G complementando los versos punzantes y las fascinantes texturas sonoras de Mora. Y todo cobra mayor sentido al escucharlo en audio espacial, un formato que ilumina el universo musical del álbum en su fascinante complejidad. “Te da la oportunidad de escuchar dónde está cada sonido exactamente”, nos comparte. “Es una experiencia brutal”. Dale play y prepárate para viajar por el pasado, el presente y el futuro de la música urbana.