Empezó a tocar música desde pequeña y a los 15 ya daba recitales en los pequeños bares de su natal Málaga. Su sonido es una mezcla de Alanis Morissette y Sarah McLachlan combinado con acentos de su país como los de Alejandro Sanz. Pero lo que caracteriza a esta artista es su voz, dulce y ronca a la vez, y sus letras. Martín va del amor al desamor, a las palabras íntimas en melodías de rock-pop y baladas que tocan fibras sensibles e invitan a pensar. En esta lista encontramos lo mejor de su discografía.