En la región de campos fértiles de Ebonyi, en Nigeria, la joven Osinachi Kalu creció dentro de una amplia familia y desarrolló una enérgica voz góspel que la convertiría en una de las mejores intérpretes de este estilo religioso y universal. Bajo el nombre de Sinach ha compuesto más de 200 canciones, todas ellas con un denominador común: el amor a Dios. Temas tan bellos y enérgicos como su poderosa voz, que podría rivalizar con la de las mejores cantantes de R&B de Norteamérica. El góspel vuelve a África con la increíble voz de Sinach.