Cuando el sello Def Jam, a priori especializado en hip-hop, quiso expandir su catálogo hacia el soul y el R&B, Montell Jordan se convirtió en su primera opción como solista. El cantante californiano tenía todo lo que buscaba la discográfica: una voz irresistible, una imagen moderna, una propuesta musical con muchas conexiones con el rap y una facilidad pasmosa para facturar hits. Entre las baladas acarameladas y los himnos de club, Jordan protagonizó algunos de los momentos más exitosos y celebrados del R&B entre mediados de los 90 e inicios de los 2000. ¡Recúperalos!