En el firmamento del pop argentino cada estrella brilla con luz propia. En el caso de Emilia Mernes, ese fulgor en forma de su propia identidad artística es claramente particular. Tras un exitoso paso como la vocalista principal del grupo de cumbia pop Rombai, comenzó su carrera por separado para encontrarse a sí misma. Así, ha decidido remontarse a la era dorada del pop para buscar inspiración en las canciones con las que creció durante la década del 2000. Esto con el fin de extraer su esencia melódica y adaptarla a ritmos más actuales como el reggaetón, R&B o incluso RKT. El resultado es un sonido que se acerca al corazón no desde la nostalgia, sino desde la modernidad de sus emociones. A final de cuentas, para Emilia y para el resto del mundo, el romance nunca pasará de moda.