Tricky Stewart es el nombre que se encuentra detrás de los éxitos de Rihanna, Beyoncé y Justin Bieber en los años 2000. Pero también es la figura curtida en la década de los 90 de la mano del productor L.A. Reid, junto al que conoció de primera mano los entresijos de una industria en una época en la que la figura del productor estrella llegó a ser tan importante como la del propio artista.