Ralph Vaughan Williams

Ralph Vaughan Williams logró forjar un estilo nacional inglés a partir de fuentes tan diversas como las canciones rurales y la música del período Tudor. Nacido en Gloucestershire en 1872, se educó bajo la influencia de referentes de la corriente dominante en Europa: Handel, Mendelssohn y Brahms. Su redescubrimiento de elementos antiguos y casi olvidados de la música inglesa culminó en la edición de The English Hymnal, un volumen que recopilaba tanto canciones populares (a menudo transcripciones de cantos de los trabajadores agrícolas) como melodías Tudor olvidadas, además de componer varios himnos inspirados en esas fuentes. Influencias más lejanas, como los colores orquestales que descubrió gracias a Ravel (con quien estudió en 1907–08) y el idealismo místico del poeta Walt Whitman (cuyos textos aparecen en A Sea Symphony, de 1909, y en Dona Nobis Pacem, de 1936), fueron también decisivas a la hora de definir su estilo y sensibilidad personales. La atmósfera típicamente melancólica de su música se materializó por primera vez en la Fantasía sobre un tema de Thomas Tallis. Mientras que el popular The Lark Ascending refleja el amor de Vaughan Williams por la campiña inglesa, en el oratorio Sancta civitas, en la música para el ballet Job: A Masque for Dancing y en la feroz Sinfonía N.º 4 se revela un lado más oscuro e incluso violento. Ya cerca de los 70 años, emprendió una exitosa carrera como compositor de bandas sonoras que culminó con Scott of the Antarctic en 1948. Murió en 1958, pocos meses después de asistir al estreno de su Sinfonía n.º 9.