Canelita

Nació en 1989 en el mítico barrio algecireño de La Bajadilla, en las mismas calles donde el maestro Paco de Lucía rasgueó su primera guitarra años antes. Canelita creció entre fandangos y bulerías, tangos y rumbas, empapándose de la cultura flamenca mientras empezaba a deslumbrar a todos con su extraordinaria voz. De hecho, su apodo lo acuñó Manzanita al escucharlo cantar en la grabación del disco de homenaje al cantaor malagueño El Chino. Efectivamente, aquel chaval era “canela fina”, y lo demostraría en sus primeros álbumes, Vivo Errante (2004) y Por Mi Calle (2005), publicados cuando apenas era un niño y con los que se convirtió en una de las grandes promesas de la escena flamenca de principios de los 2000. Dos décadas después, y sin más publicidad que la fama que le ha reportado su inmenso talento, Canelita es todo un fenómeno del flamenco contemporáneo y su arte es reconocido más allá de nuestras fronteras, en países como Alemania, Francia o Japón. El cantaor consigue convencer tanto con el cante jondo de “Piel Canela” o “Colorá” como con la fusión de “Dale Comba”, “Baila Reggaeton” o “A Bernabé”. Con un pie en la tradición más profunda y otro en el siglo XXI, este artista algecireño está llamado a ser uno de los grandes renovadores del género.