Emmanuel Tjeknavorian, hijo del compositor y director Loris Tjeknavorian cuyo Violin Concerto interpreta aquí, es un sorprendente prodigio con una fuerte personalidad musical. Su versión del concierto de Sibelius recibió una mención especial en el Concurso de Violín Jean Sibelius de 2015, en el que terminó en segundo lugar. El joven músico demuestra un control y una imaginación formidables, y la orquesta de Frankfurt es una excelente acompañante. También lo hace en el menos conocido concierto de su progenitor, una obra que se inspira en la herencia armenia del compositor y en el espíritu de Irán, donde ahora vive. Emmanuel lo toca con un afecto comprensible y un estilo impecable.