You Don’t Get to Tell Me About Sad
Cuando Taylor Swift anuncia un álbum, el mundo presta atención. Eso es ciertamente lo que sucedió en los días posteriores al anuncio del lanzamiento de THE TORTURED POETS DEPARTMENT, cuando la intrépida comunidad de Swifties comenzó a buscar, relacionar y fijar pistas en tableros digitales. Finalmente, se llegó a la teoría de que su undécimo álbum de estudio seguramente exploraría las cinco etapas del desamor. Y cuando sus fans concuerdan sobre una teoría, Taylor se interesa y, como era de esperarse, ha respondido creando playlists exclusivas y eligiendo canciones que se adaptan a cada etapa. La segunda etapa es la ira y es justo decir que algunas de sus mejores y más queridas canciones llevan la delantera en este campo. Aquí el sentimiento se presenta en abundancia, recorriendo temas como “Vigilante Shit”, “Bad Blood (Taylor's Version)” y, por supuesto, “We Are Never Ever Getting Back Together (Taylor's Version)”.