Con la llegada de los 90, la canción del verano se convirtió en un preciado título por el cual muchos artistas parecían competir. Hasta los grupos de rock alternativo más alejados de la diversión veraniega se dejaron contagiar por esta nueva fiebre del oro, aunque fueron los artistas del hip-hop y las bandas de pop adolescente las que mejor reflejaron en sus canciones las ansias de disfrutar del sol y la playa que nos invaden en cuanto presentimos su llegada.