Andris Nelsons es un director de orquesta que se distingue por su energía y pasión, demostrando su maestría en la expresión lírica, los detalles orquestales y la creación de una sonoridad cálida y unificada. Nació en Riga, Letonia, en 1978 y comenzó su formación como trompetista, tocando en la Ópera Nacional de Letonia antes de llegar a ser director musical de la entidad en 2003. Su fama internacional se disparó cuando fue designado director musical de la Orquesta Sinfónica de la Ciudad de Birmingham a la temprana edad de 30 años. Nelsons ha cultivado una carrera dual en la ópera y en el ámbito de los conciertos sinfónicos. En la ópera, es especialmente reconocido por su interpretación de la música de Richard Wagner y en 2010 sobresalió al dirigir una nueva producción de Lohengrin en el Festival de Bayreuth. En 2014, fue elegido director musical de la Orquesta Sinfónica de Boston y en 2017 también asumió el cargo de maestro de capilla en la Orquesta de la Gewandhaus de Leipzig. Estas dos designaciones le han permitido realizar una serie de aclamadas grabaciones para Deutsche Grammophon, destacándose ciclos sinfónicos de Brahms y Shostakovich con la Orquesta Sinfónica de Boston, un ciclo de sinfonías de Bruckner con la Gewandhaus y poemas sinfónicos de Richard Strauss con ambas orquestas. Además de su afinidad con estas obras maestras del repertorio sinfónico, Andris Nelsons también tiene un lado más ligero, como se evidenció en su participación en el concierto de Año Nuevo de la Filarmónica de Viena en 2020, el cual fue grabado y lanzado por Sony.