The Fairfield Four, uno de los grupos vocales de gospel más populares de los años 30 y 40, revivió en 1980 tras casi tres décadas de inactividad. En 1992, con sus miembros en una gloriosa tercera edad, grabaron este arrebatador álbum de himnos religiosos, la mayoría a capella, que transmiten el peso de 300 años de historia afroamericana sin perder ni un ápice de inmediatez. La voz de Walter Settles domina en los momentos más conmovedores, pero es imposible pasar por alto el contrapunto rítmico de Isaac “Dickie” Friedman.